Las piscinas climatizadas del Toralín, en Ponferrada, seguirán cerradas y esperando su rehabilitación, ahora sin plazo concreto. La abstención del PSOE y el voto contrario de Vox, hoy, en el pleno del Ayuntamiento, han frustrado la posibilidad de acometer las obras necesarias, aprovechando la subvención de un millón de euros ofrecida por la Junta de Castilla y León y pagando el resto, hasta dos millones y medio, con el ahorro de la factura de la luz del propio ayuntamiento.
Era necesaria la mayoría absoluta, con trece de los veinticinco votos de los concejales, pero el gobierno del PP y Coalición por el Bierzo, con sus doce votos, se quedó solo, tras un duro debate que se abría con la intervención de uno de los jóvenes nadadores más brillantes del “Club Natación Bierzo Ponferrada”, Mateo Autrán Pérez, de catorce años, quien advirtió que en las condiciones actuales y con decenas de nadadores en la piscina cubierta de la parte alta, sus entrenamientos se desarrollan «en condiciones muy precarias». Luego entregó el texto que había leído al alcalde.
Más nadadores, técnicos del club y familias asistían al debate político y tuvieron que irse casi entre lágrimas.
En la oposición insistieron en reclamar que la Junta pague el importe total de las obras. Al tiempo, planteaba la posibilidad de acometer, únicamente, la consolidación de las estructuras y forjados del edificio que cuesta unos 700.000 euros, dejando para otro momento la renovación de los equipos de climatización e instalación eléctrica, la conexión a la red de calor y la instalación de las nuevas placas solares en la cubierta. El primer teniente de alcalde y portavoz de Coalición por el Bierzo, Iván Alonso, advertía que el proyecto no se puede trocear y utilizó el símil de «ir al dentista». Añadió que la complejidad de esta intervención ha ido incrementando, progresivamente, los costes de la obra hasta los dos millones y medio de euros.
Durante el debate, compartían argumentos PSOE y Vox, para exigir que la Junta aporte el coste total de la obra, porque en su día, el consejero de Medio Ambiente, meses después de la toma de posesión de Marco Morala como alcalde, anunció “toda la ayuda” que fuera necesaria. Primero hablaba la portavoz de Vox, Patricia González, instando al equipo de gobierno a «plantarse en Valladolid».
Después, el socialista Olegario Ramón quiso rechazar responsabilidad en la situación de deterioro de la piscina por falta de mantenimiento cuando él era alcalde. Atribuyó todas las culpas al actual gobierno. E insistió en que la Junta tendría que asumir todo el coste o, de lo contrario, acometer únicamente obras por el importe de un millón de euros.
La ingeniera municipal, Mar Pardo, habló ante el pleno y descartó la posibilidad de trocear el proyecto, porque supondría un sobrecoste en la intervención, ya que habría que destruir tuberías viejas y reponerlas a medida, sin cambiar todo el sistema. La funcionaria intervino a petición de la portavoz del PP, Lidia Coca, que también defendió que la Junta ha cumplido sobradamente aquel compromiso del consejero en el año 2023.
Ni siquiera sirvió la llamada personal del portavoz bercianista, Iván Alonso, a su tocayo, concejal del PSOE y ex delegado de Deportes, Iván Castrillo, a quien invitó a votar a favor. El portavoz del PSOE, Olegario Ramón, replicó contra lo que interpretó como un ataque a la integridad y la disciplina de voto de su grupo.
Al final, Vox no varió su negativa y el PSOE no se movió de la abstención, posturas que frustran este proyecto. Y después de la votación, intervino el alcalde, Marco Morala, para recriminar esa postura de la oposición, a la que emplazó a dar explicaciones “en la calle” por un triple perjuicio, deportivo, social y económico, y por haber renunciado directamente al millón de euros ofrecido desde el gobierno autonómico. Concluyó diciendo que la abstención no es contraria al equipo de gobierno del Ayuntamiento, sino que «desprecia a los ciudadanos».
Salieron adelante el resto de asuntos del orden del día del pleno, empezando por la estrategia para implantar un Plan para la Transformación Energética de los Edificios municipales, instalando paneles solares. Tiene vigencia hasta el año 2036 y supondrá toda «una revolución», en palabras de Iván Alonso. Luego, Lidia Coca cifró en tres millones de euros el ahorro que se podrá obtener en una década. Habrá qeu ver si el “no” al proyecto para la remodelación de la piscina climatizada trunca todas estas aspiraciones.
Además, el incremento de un millón de euros para el plan de renovación de viejos edificios del barrio de la Puebla; pequeñas inversiones en la red de abastecimiento de agua; las subvenciones para Medio Ambiente y promoción del Comercio; y la petición a la Consejería de Agricultura de la Junta, para que construya tres balsas de agua como abrevadero de ganado y para ayudar en la extinción de los incendios forestales en montes de Los Barrios de Salas.
Y en el turno de ruegos y preguntas, Vox reclamó más atención del Ayuntamiento de Ponferrada a la presencia de aves en edificios vacíos del entorno de la iglesia de San Ignacio. Es otra consecuencia de la sentencia judicial que obligó a rebajar el volumen al que tocaban las campanas y que la parroquia cumplió suprimiendo totalmente el tañido.
Mientras, el PSOE reclamó prisa para disponer de los terrenos que la Diputación necesitará para acondicionar la carretera de acceso a San Adrián de Valdueza.
