Y lo hizo cumpliendo el acuerdo institucional tomado en 2022 por su ayuntamiento, que propició el primer acto de ese tipo respaldado por un ayuntamiento en toda España.

Este monolito ubicado en la curva de Magaz de Abajo, y en el que luce una placa con los nombres de 35 fusilados, acogía una ofrenda floral, a cargo de los descendientes de aquellos hombres. Entre ellos, Emérita Canedo, nieta mayor de una de las víctimas a quienes se recuerda en Magaz y preocupada por el futuro y «que no venga otra guerra, que solo traen hambre, muerte y destrucción». En términos similares, Consuelo Vega Quindós, nieta de otro de los represaliados, considera que mantener vivo este legado es una «obligación porque todavía hay gente que no se ha enterado. No nos tenemos que avergonzar y tenemos que reivindicarlo para que no vuelva a pasar. Porque está pasando exactamente igual que lo que contaba mil abuela», concluía.

«Momentos de retroceso», manifestó luego el alcalde de Camponaraya, Eduardo Morán, quien fue especialmente crítico con el número dos del PP nacional, Miguel Tellado, por haber dicho que hay que «cavar fosas» para el final del actual Gobierno. El hombre fuerte del PSOE en el Bierzo considera que más allá de «la barbaridad que suponen, en un mandatario de un partido que aspira a gobernar, dicen muy poco a favor de la Democracia. Y con estas actitudes estamos en proceso de retroceso y los demócratas tenemos que hacer un esfuerzo para revertir esta situación, que cada día es más peligrosa. Sobre todo, cuando los mensajes de la extrema derecha calan entre la gente joven».

Eduardo Morán se confesó preocupado por esa circunstancia y apeló a un esfuerzo desde el punto de vista didáctico. El alcalde de Camponaraya estuvo acompañado por concejales de su equipo de gobierno. También asistió al acto el presidente del Consejo Comarcal del Bierzo, Olegario Ramón.