
El Ayuntamiento de Castropodame aprobó, en pleno, un pliego de alegaciones contra el proyecto de la planta de biogás. El documento, redactado por especialistas, pone énfasis en que las normas urbanísticas municipales impiden establecer esa actividad en el lugar elegido para ello. Además, alerta sobre un excesivo tránsito de camiones «inexplicable, cuando en otros lugares quieren implantar zonas de bajas emisiones», afirma la alcaldesa, Pepi Álvarez (PSOE). A todo ello, se añade el temor de que se puedan producir daños en la ermita de San Bernardino y su entorno, de gran valor sentimental para los vecinos, dado que es el patrón de Castropodame. El texto se pondrá a disposición de las pedanías y los vecinos que quieran suscribirlo.