Implantar la carrera de Medicina en el Bierzo, desde el primer curso, “es posible y viable”. Solo depende de la voluntad y de que los profesores acepten venir a impartir clases. Es como volver a tiempos del pasado cuando los docentes rehuían el campus de Ponferrada.
Así de contundente lo ha dicho el anterior rector de la Universidad de León, Juan Francisco García Marín. Casi un año después de su adiós al puesto, y durante una época que contribuyó a salvar y dinamizar el campus berciano, el ex rector lo tiene meridianamente claro. Es posible impartir las futuras clases de Medicina, a la vez, en Ponferrada y en León.
Y ahí terminó la reflexión el anterior rector, quien antes había advertido que, de todas formas, lo fundamental para establecer los estudios de Medicina es disponer de la financiación. Juan Francisco García Marín reconoció que su posición a favor de Ponferrada choca con los criterios de la rectora y su equipo.
Avalado por esta opinión, el alcalde de Ponferrada, Marco Morala, persevera en la demanda de traer Medicina al Bierzo, desde el primer curso. Confía en una rectificación de la rectora.
Así se decía esta tarde, en el acto de clausura del curso, en la Universidad de la Experiencia en Ponferrada. Un total de 282 veteranos estudiantes despedían el año. Y 62 se graduaban.
Antes de recibir la beca y festejarlo, manifestaban que esta presencia en la Universidad les ha “dado vida” y ayudado a redescubrir el patrimonio berciano. Pero, sobre todo, destacan la enorme importancia del contacto con sus compañeros.
La directora en León del Programa Interuniversitario de la Experiencia, Gema Vallejo, resaltaba, en su primera clausura de curso, que los alumnos han demostrado ser muy buenos estudiantes.
