Los de este domingo y el sábado siguiente serán los partidos oficiales 44 y 45 en esta temporada para la Ponferradina. Si bien lejos de los 60 que, por ejemplo ha disputado el Fútbol Club Barcelona, por citar al vigente campeón en Primera División, es un número bastante apañadito para un equipo de fútbol. Tan apañadito como exigente porque la consecución del gran objetivo depende de lo que ocurra en Estadi de Encamp y en el Toralín en un lapso de seis días.

Y por ahí puede venir la primera gran preocupación, por saber en qué estado físico llegan los blanquiazules al duelo contra el Andorra. Frente al Antequera los de Javi Rey evidenciaron algún síntoma de agotamiento que el propio entrenador no ha querido sacar del contexto del momento en el que nos encontramos. Pero todavía el miércoles, alguno arrastraba molestias.
No debe estar para tirar cohetes el rival aunque su evolución desde que Beto Company se hizo con las riendas haya sido la propia de una de las mejores plantillas de Primera RFEF. Desde que el técnico valenciano debutara, precisamente en Ponferrada, con derrota, el 26 de enero, apenas si ha sufrido un tropiezo digno de mención, la derrota con el Sestao que le privó de pelear por el título en la última jornada.
Descritos los hechos, que nadie lo interprete como un canto a la desesperanza, más bien todo lo contrario porque si algo ha demostrado esta Deportiva es que es una consumada experta en levantarse y sobreponerse a las adversidades. De otra manera no estaríamos hablando de un subcampeonato, solo por un gol, después de haber enjugado trece puntos de desventaja. Y un subcampeonato en este nuevo formato de play off no es moco de pavo.
Para afrontar el primer envite podemos tener claros al menos ocho titulares, los de siempre, y dudas en el lateral izquierdo, centro del campo y punta de ataque. En cualquier caso, el excelente rendimiento durante el anterior partido de Andoni y Doué avala la participación de ambos desde el inicio en detrimento de dos pesos pesados como Álvaro Ramón y Markel Lozano. Para el ataque lo lógico sería volver a contar con la bravura de Cortés pero eso ya depende del estado físico con el que llegue el que, de momento, es el jugador más determinante de la fase de ascenso.
Para el Andorra parece ser más sencillo ya que la única variación con respecto al doble duelo contra el Ibiza será la reaparición de Diego Alende en el eje de la zaga. Recién salido de lesión, el central de Santiago de Compostela debería dar más consistencia defensiva a un equipo cuya virtud la encontramos del centro del campo hacia adelante.
Por la declaración de intenciones, debería ser un partido atractivo. Javi Rey asegura que su planteamiento no será defensivo, que sería un suicio; Beto Company tira de evidencia y anuncia que los del Principado buscarán el gol, no le queda otra. Por el hecho de ser subcampeón a la Ponferradina le favorece cualquier empate.
Hasta ahora son 43 partidos oficiales pero nada cuenta. Este domingo, a las 17:00 horas, en el estadio de la Federación Andorra de Encamp y con la dirección del cartagenero Ojaos Valera, primera batalla por el ascenso a Segunda División.