Promueven la implantación de un “glamping”, como un camping de lujo, en el municipio de Arganza. Una empresa, que se llama “Fuerzagrav”, tramita el proyecto. Contempla establecer cuarenta bungalós en una superficie de unas dos hectáreas, entre San Vicente de Arganza y Espanillo, y con una inversión inicial de hasta seiscientos mil euros.


De momento, la iniciativa ya ha sido presentada en el Ayuntamiento de Arganza, que ha abierto el proceso de información pública obligatorio, antes de otorgar permiso de uso excepcional de este suelo rústico y de conceder la licencia urbanística.
El proyecto se completaría con la rehabilitación de una decena de viviendas, que los promotores han comprado, ya, en San Vicente de Arganza, y que se aprovecharían como restaurante, tienda o más alojamientos.


El alcalde de Arganza, Javier Ovalle, reconoce que es una propuesta ilusionante.
Pero las aspiraciones de la empresa “Fuerzagrav” no acaban ahí. Sus promotores están dispuesto a negociar con las juntas vecinales y el ayuntamiento, la posibilidad de aprovechar montes de utilidad pública cercanos, para poner en marcha opciones de turismo activo.
Antes de las autorizaciones municipales, el proyecto turístico para San Vicente de Arganza necesita permisos de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil y de la Diputación de León, además del visto bueno urbanístico de la Junta de Castilla y León.