Orden de sobreseimiento provisional y archivo de las investigaciones judiciales que se abrieron, tras la caída de una escalera exterior en el instituto “Álvaro de Mendaña” de Ponferrada, en mayo del año pasado. El suceso causó heridas a catorce alumnos. La Justicia considera que no se pueden exigir responsabilidades penales, después de determinar que el incidente tuvo origen en el deterioro de la estructura y su deficiente ejecución.
Así se dice en un auto dictado por el juzgado número tres de Ponferrada. Su titular, la juez Pilar de Lara, pone de manifiesto que hay datos suficientes para “no estimar punible la conducta investigada” por un posible delito de lesiones imprudente. Añade que “no se puede exigir responsabilidad penal a las autoridades educativas ni a los responsables del centro, porque la instalación se revisó el año 2016, con informe técnico favorable”.
La resolución judicial cierra un caso abierto cuando el 20 de mayo del año pasado, cedió esa escalera metálica en el exterior del instituto, donde estaban varios estudiantes. Catorce de ellos resultaron heridos, con lesiones de diferente entidad. Dos menores necesitaron de tratamiento médico o quirúrgico.
Aunque los padres no presentaron denuncia expresa, lo que propiciaría el archivo provisional de la causa por falta de denuncia, dice la juez, su señoría ha querido entrar en el fondo del asunto “para evitar trámites inútiles y gastos a los padres”, señala.
Afirma la juez que “está clara” la causa por la que cayó aquella escalera instalada en 2006, para que los alumnos pudieran acceder desde el patio a los soportales. Advierte defectos en el anclaje a la pared y que los tornillos usados para ello ya estaban oxidados y en estado de corrosión. Y añade que el deterioro de esos elementos no era apreciable a simple vista.
En todo caso, la resolución deja abierta la posibilidad de que los padres de los alumnos heridos en ese incidente, puedan ejercer acciones para “resarcimiento de los daños y perjuicios obviamente sufridos”, dice el auto judicial. De momento, la escalera sigue caída sobre el suelo, en el patio del instituto «Álvaro de Mendaña», tapada por una lona y acordonada con cinta en la que se nota el deterioro del paso del tiempo.
