Bembibre medita cambiar el enfoque para convertir el histórico “Edificio Villarejo” en un centro cívico y cultural, mejor que un museo. Estudiará la posibilidad de que sea un espacio “vivo”, con actividades abiertas a los vecinos, y no únicamente, un lugar donde exponer la colección de fotografías antiguas de Bernardo Alonso Villarejo, y los cuadros de Amable Arias y María Isabel Alonso.
Para ello, el Ayuntamiento de Bembibre y las herederas de Villarejo crearán un grupo de trabajo, que definirá las opciones de hacerlo realidad. Así se constataba en una conversación entre las representantes de la familia y la alcaldesa, Silvia Cao, quien destacaba que ha «quedado patente la voluntad de ambas partes en que el proyecto se lleve a cabo. Empezaremos por la creación de un grupo de trabajo con los herederos, que están recopilando material para la exposición. Y el objetivo es hacer viva la cultura para todos». La alcaldesa concluía señalando que fue una «conversación placentera, que demuestra el acuerdo para trabajar por Villarejo y por la cultura».
El Ayuntamiento de Bembibre sigue esperando lograr subvenciones, de hasta 800.000 euros, para culminar las obras de rehabilitación del edificio Villarejo, antes de poder desarrollar actividades en su interior. Esa casa, ubicada en la Plaza Mayor de Bembibre, fue asumida por el Ayuntamiento en el año 2015, en virtud de un acuerdo de donación y venta, con la condición de convertirla en museo, antes de que terminara el año pasado. De momento, se sigue esperando.
