La resaca de las fiestas deja un serio disgusto en la pedanía ponferradina de Santo Tomás de las Ollas, por el destrozo de buena parte de la decoración navideña que habían hecho y montado los propios vecinos y que había ganado el premio a la mejor ambientación, en el concurso convocado por el Ayuntamiento de Ponferrada.
Las figuras de los muñecos de nieve que habían creado aparecieron con las cabezas arrancadas. Parte de los elementos colocados junto a la iglesia mozárabe, en un carro típico de madera, también quedaron destrozados. Igual que bolas de Navidad o velas de forespan, que aparecían esparcidos por las calles de Santo Tomás, como se comprueba en las imágenes facilitadas por la Junta Vecinal.
Así estaba antes ese carro de bueyes:
La incidencia se puede atribuir al viento o, quizás, a una acción vandálica. No lo tiene claro el pedáneo de Santo Tomás de las Ollas, Carlos Fernández, quien confirma ese sentimiento de pena entre los vecinos y su firme disposición de reparar esos elementos dañados.