Ponferrada ha comenzado ya la Navidad con el habitual acto de encendido de las luces, que este año cuenta con 100.000 puntos más de luz con la idea de que todos los ponferradinos pasen una fiestas felices y vuelvan «a sentirse como niños», según dijo el alcalde de Ponferrada, Marco Morala.
El Ayuntamiento ha hecho un esfuerzo especial en la decoración de este año, donde destaca especialmente la calle Gil y Carrasco, con dos zonas diferenciadas. La primera, entre el Museo de la Radio y la Oficina de Turismo, un «Universo de bolas» que pretenden «generar las ondas de la radio y emitor nuestro potencial turístico», dijo el alcalde.
A continuación grandes estructuras soportan un «Pasillo de estrellas» que dan la bienvenida hacia el Castillo de los Templarios.
Las novedades continúan por el Puente García Ojeda, la plaza Luis del Olmo, la avenida Pérez Colino y la Plaza Lazúrtegui.
También novedosa es la iluminación de la torre de la Basílica de la Encina, que pretende ser «un faro». Y a los pies de la Basílica, un belén luminoso.
El acto de encendido volvió a congregar a numeroso público en la plaza del Ayuntamiento, donde seis niños fueron los encargados de pulsar el botón de encendido.