El Gobierno estudiará el destino de las subvenciones públicas que recibió la empresa Emobi, para establecer su fábrica de torres para parques eólicos en Ponferrada, que está inmersa en proceso concursal y que ha firmado el ERE que deja en la calle a 111 trabajadores de la propia Emobi y de Ibermón, en Bembibre.
Esta mañana, el subdelegado del Gobierno en León, Héctor Aláiz, ha reconocido la necesidad de revisar esos expedientes. «Hay que mirar los aspectos técnicos y saber qué ha pasado con la gestión de ese dinero. Obviamante, se va a estudiar», ha dicho el representante del ejecutivo central en la provincia.
Conviene recordar que Emobi logró 624.000 euros de ayudas del Ministerio de Transición Ecológica y accedió a otros siete millones de euros de financiación, a través de préstamos con condiciones favorables, gestionados desde el Ministerio de Industria. Además, la compañía de estructuras metálicas se vio favorecida por el Instituto Financiero de la Junta de Castilla y León, Sodical.
Mientras, el presidente de la Diputación de León, el berciano Gerardo Álvarez Courel, ha expresado “tristeza, decepción y angustia” por la situación en la que, ahora, se encuentran los 111 antiguos empleados de Emobi que se han quedado en la calle. «Desde luego, no parece el proyecto de futuro que se presentó para el Bierzo ni para Bembibre. Trataremos de revertir la situación pero entiendo que son temas empresariales. Se entra en concurso de acreedores cuando las cuentas no cuadran», explicó.